ESTE TEXTO NO ES MIO SINO DE MARIA TERESA RUPPERT
A mi el diez por ciento de la obra de Pablo Suarez me gusta. Pero claro hay obra para museos, que uno puede apreciar pero nunca se llevaría a su casa, obra para pensar y otra que es para disfrutar y convivir con ella. Era un artista muy capaz , ayudante de Antonio Berni, que eligió igual que Marcia Schvartz expresarse críticamente a través de recursos grotescos.
Personalmente estaba en el Museo de Bellas Artes cuando presentaron la obra del personaje agarrado de las manijas del subterráneo y lo recuerdo muy particularmente porque recorría la muestra con un señor a quien apenas conocía (amigo de una migo que se había apartado brevemente para mirar otras obras)y al llegar a la obra de Suarez sufrió un impacto tan grande y se impresionó tanto que cayó a mi lado como fulminado por un rayo, fue un revuelo y varias personas me ayudaron a levantarlo. D
espués su amigo que apareció a ayudar relató que un mes antes el señor había perdido su único hijo atropellado por un tren mientras cruzaba las vías, o sea que nunca podré olvidar esa obra mientras viva.
SI NO VISTE LA PASTELA DEDICADA A PABLO SUAREZ, ESTA ES TU OPORTUNIDAD
síndrome de Stendhal ferroviario
Ese Señor no está preparado para la vida. Si no pudo superar lo de su hijo y algo que ve “relacionado” con la muerte de su hijo… le recomiendo un buen terapeuta. Además, el sintoma de Stendhal, más habla de la persona que observa la obra del artista que la obra del artista en si….
Nadie está preparado para la vida, creo.
Cuando la baraja viene mal por cuestiones trascendentales como la pérdida de seres muy queridos, o asimetría en el amor ( o por cuestiones menos “medulares” – depende para quién lo padezca , desde ya – como las crisis existenciales por el paso del tiempo, o las angustias vocacionales, etc), no sabés qué es lo que te va a impactar, ni cuándo ni cómo.
Y si, la obra inanimada no puede sufrir ningun sindrome de nada, genia! Menos mal que estas vos para hacer este tipo de aclaraciones. Sobretodo con respecto al hombre si está o no está preparado para la vida. Tomatelás!
Perdón, el mensaje era referido a la boludez que dijo Pupi
Esperá que la vida te pegue una piña de frente y volvé a opinar, a ver si decís las mismas boludeces.
Jeje, título engañoso el del post…si no lo leés, pensás que el tipo sufrió un soponcio al mirar el culo del chongo 😱😉😁
Las obras de Suarez, Schvartz y Berni me impactan en general pero a la vez ese modo grotesco en el que retratan o representan a los marginados, a los pobres, me genera una sensación contradictoria, extraña. Son artistas que en mayor o menor medida manejan muy bien una técnica que ponen al servicio de una estética personal que me parece estar alimentada más por sus fantasías (especulativas o redentoras) que por un contacto genuino con esa realidad que abordan. Y aunque pueden ser fantasías burguesas bien intencionadas creo que parten más de la compasión (compasión político-ideológica que es igual de dañina a la religiosa..) que de la idea de belleza. Es cómo si se pudiese apreciar belleza en ciertos trazos o detalles pero no en los rostros que parecen siempre apocados, afeados, deformes… Siento que no pueden llegar a erotizar los cuerpos, no en el sentido publicitario sino de la belleza magnética que por ejemplo supo imprimir Caravaggio en los cuerpos y rostros de los pobres que usaba como modelos que a su vez representaban otra cosa más que a sí mismos, porque también parece que sino los pobres sólo pueden ser representados en tanto pobres, sin darles lugar a ficcionalizar y ser otra cosa de lo que son… Suarez apela a algo más sexual pero no por ello erótico, sus criaturas aparecen desnudas pero parecen una parodia de sí mismos, y con los tres artistas me sucede que ese vaciamiento de erotismo me significa una especie de vaciamiento de alma, como si los personajes fueran un trazo grueso, unívoco, sin complejidad de carácter, sin humanidad, no dando lugar a otras lecturas posibles que las que de antemano se tienen de forma prejuiciosa acerca de la pobreza en la mirada burguesa que es la que termina legitimando a esas obras y colgándolas o luciéndolas en un distinguido living o reconocido museo..
No sé si es de la permanente de Constantini, pero al menos estuvo bastante tiempo (o aún está) en el Malba, en el 1er piso, en un lugar malísimo, que no tiene buenos puntos de vista.
Con respecto a lo del señor de la anécdota… qué decir. No hay peor cosa que la muerte de un hijo; y la asociación fue directa, hubo más literalidad que otra cosa. No obstante eso, los tipitos de Suárez (con todo respeto llamados así) creo que generan la imagen del pibe sufrido, entre otras muchas cosas.
P.D. Recordar que fue a partir de este blog, y por el cañechat de Rodrigo con Laura Batkis, su viuda, que la obra de Suárez fue cedida amable, y también responsablemente, por Laura para el disfrute y el estudio de todos.
Gracias Laura y gracias Rodrigo.
Me encanta como lo expresa Eloy.
Tal vez esra obra se queda en un umbral y reniega de la posibilidad de explorar y representar un erotismo despegado de los patrones esteticos, que parecen fijar que por fuera de esa estructura de valores, lo humano es solo grotesco o esencialmente grotesco, tal vez temible por contaminante, por anticipar la posibilidad del deterioro personal y la inevitable.muerte, que nos comprende y nos define. (Estoy especulando) ¿La estetica burguesa es antes que nada un escudo?