ESTE TEXTO NO ES MIO SINO DE FIRULACIO
En los EE. UU. 4 compañías discográficas controlan el 88% del mercado de la música, por lo que estamos constantemente inundados con la misma basura del pop reciclado que chupa todo lo que se está poniendo de moda y lo homogeneiza para que pueda ser accesible al público.
Incluso la música “indie” tiene que ser ridículamente monótona para sobrevivir hoy en día.
Nadie quiere un artista que piense genuinamente fuera de la caja, ya no hay mercado para eso.
A medida que pasa el tiempo, asumiendo que estas pocas empresas continúan dominando lo que consume la gente, imagino que las cosas seguirán empeorando.
La mentalidad del público en general sobre lo que califica como música seguirá siendo cada vez más estrecha, ya que, como han demostrado los estudios, aprenderán a gustarle lo que sea que les den de comer.
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En argentina sergio massa se acaba de quedar con la mayor distribuidora electrica del pais
https://www.lanacion.com.ar/economia/negocios/servicios-publicos-vila-manzano-compraron-edenor-nid2554026
Las mega empresas antes vendían Zeppelin, Pink Floyd, Queen. No lo veo como un problema de la cantidad de empresas sino que simplemente no existe hoy una nueva generación que siga el género y lo que produce que no haya bandas del nivel aquel.
Y así como pasa en el rock, ¿no pasa también en la literatura, la pintura etc? ¿O es que hay un Borges escondido que las mega editoriales no le dan bola o un Picasso desconocido que no puede mostrar sus cuadros por culpa del negocio de las galerías?
Puede que el problema también sea que al haber cada vez mas cosas sea mas difícil ser original o que simplemente vivimos en un mundo mas superficial. También puede ser una combinación de las dos cosas.
Sin ir mas lejos antes la mega empresa Sony tenía a Cerati. Si hubiera otro que tuviera la importancia de Cerati no me caben dudas que estaría en el catálogo. Simplemente no hay.
Es deprimente, pero lo que vende hoy es esto:
https://www.sonymusiclatin.com/artists/
Qué lejos quedaron aquellas épocas de “Convivencia Sagrada”…
* El logo fue creado a partir de una imagen de Ted Turner y el bajista Martin Turner de la banda Wishbone Ash en 1971.
https://imgur.com/a/3thqmfd
Al contrario esta todo mucho mas democratizado, salvo youtube que te muestra lo trending sponsoreado.
Podes perderte en bandcamp, spotify encontrando artistas nuevos horas, dias., y me centro en spotify porque representa al negocio de la musica en la actualidad. Te gusta el genero que sea, electro minimal noise con ascendente en capricornio, esta ahi, y recomendaciones no sponsoreadas sino de gente que consume lo mismo.
Para una discografica es mas negocio lucrar con el alma de alguien que ya comerciado que inflar a un muneco nuevo.
Cuando necesitan un nuevo muneco voodoo lo acaban y eyaculan a la masividad desde otras plataformas mas alternativas.
Que no haya artistas es un chamuyo funcional a las grandes productoras…
Artistas, o gente que hace música?
Hoy está lleno de eso.
Perderse en una disquería por horas ensuciándose las yemas de los dedos recorriendo vinilos era otra cosa.
Hoy todo es más efímero y descartable.
Rockstars hay muchos. Músicos, apenas unos pocos, y casi la mayoría se han ido para siempre.
Esperando al nuevo Bowie, Hendrix, Prince o Michael Jackson? Esperemos sentados toda la Eternidad.
¿Y quiénes son los accionistas de Spotify?
Las discográficas.
I rest my case.
No es tanto el número, por ejemplo universal es distribuidora de sellos más chicos, el tema también es sumarle las plataformas digitales de streaming que fue un pijazo para la industria.
Lo que demostró el COVID es que los músicos sin conciertos se cagan de hambre porque entre los cortes que aplican las discográficas y demás cobran centavos por venta de canciones. Los peores son las plataformas digitales, opuesto a la discográfica que invierte en un músico en comisión, marketing y demás, las digitales pagan centavos de acuerdo a la popularidad y demás, parásitos,
Es triste escuchar músicos cagandose de hambre porque con esto del COVID no pueden hacer conciertos, mientras las discográficas y las plataformas de streaming hacen fortunas.