ESTE TEXTO NO ES MIO SINO DE ENSERIOCHE
Es parecido pero diferente a la mafia del amor:
En la mafia del amor alguien te tiene que dar la entrada, es tu padrino, mentor, mecenas y/o amante. En cambio el sistema productivo que armaron estos jóvenes es distinto: Por un lado, algunos te pueden dar entrad;, pero también hay actores que entran a fuerza de su propia popularidad (likes, views) y talento. La diferencia es cómo s “la institución” o el mainstream recibe a los nuevos actores, y ahí está la diferencia: A vos Rodri en las artes visuales la institución decide cancelarte, porque como bien explicó Bordieu su lógica es excluyente. En cambio en el mundo de la música LGante fué bienvenido, bendecido, desarrollado y expandido x Bizarrap. Ellos entienden que la mejor manera de crecer es potenciándose entre ellos y que cada vez sean más, crear la “comunidad”.
Esa mirada provino de la cultura rap. De la autogestión del Halla, el 5to entre otros Y cuando llegó el momento en que el fenómeno (“a escena”) era tan grande que podía comercializarse, a diferencia de los museos y las galerías en donde pervive el aura de la obra original a pesar de la pragmática digitalización de sus contenidos obligada pues pandemia; las empresas que comercian las batallas de freestyle, entendieron que era mejor el otro juego: Urban Rooster, en vez de perseguir el pirateo de sus videos (política clásica de la industria musical), permite que los creadores de contenido incluyan sus contenidos, a cambio de que al comienzo de sus videos, los youtubers incluyan el logo de “Urban Roosters”. Los institucionaliza, y aprovecha la difusión que los youtubers le dan a las batallas. Este procedimiento es análogo al mashup originario del rap: se usa pero procesa el material de los demás. Y eso lo hacen no sólo porque saben que igual los fans verán la batalla original cuando es transmitida por UR, sino porque las views no son su principal negocio, en eso no “compiten” con los youtubers. Su negocio son las marcas que lo bancan en las batallas, el libro, yo que sé…
Pero sobre todo los creadores independientes de contenido, entendieron las virtudes de la creación colectiva de cultura. Por ejemplo El Humor del Freestyle reprocesa y expande las batallas y sus actores, produciendo mito, apodos, términos nuevos, código. Estos retroalimentan a los freestylers que además reaccionan a sus videos, reacción citada luego en El humor del freestyle. También UR luego lo cita y así termina de instalarse en el circuito productivo al que entró en base a su talento y a fuerza de compartidas y likes que le dió el público: es bueno y se sostendrá mientras lo siga siendo, porque por más institución que te cobije, si dejaste de ser relevante lo decide el público desuscribiéndose de tu canal. Igual, como ya a esta altura sabemos, nada es para siempre.
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EL LANPODCAST DE ESTA SEMANA ES PARA LANATA Y LEVINAS SACANDOLE LA CARETA A Andrea Giunta: ‘Cañete la desarmó teóricamente y ella no lo pudo soportar’
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de hecho hubo una situación en q uno de los capangas de los freestylers, dtoke, todo así onda mito y dinosaurio, se tomó a mal el tono un poco irónico de el humor del freestyle y no lo “legitimó” con su buena opinión, pero quedó él en offside y finalmente tuvo que volver a verlo xq era él el que se quedaba afuera x no reaccionar y x no entender el mambo…
Esta gente tiene halitosis.
Ay, están haciendo arte, qué pelotudo, no me di cuenta. Dios!
Yo en su momento escribí de cosas muy diversas por encargo (demasiado, tenía que ponerme y guitarrear bastante, aunque era sustancialmente mejor q laburar en una shell), casí diría que en algún sentido las pensé empáticamente, aunque x suerte en una semana me olvidaba de todo. Es un principio que en neurociencia tiene un nombre, cierta economía que hace el cerebro para que las pelotudeces no le ocupen espacio y pasen de la memoria a corto plazo a la papelera sin retorno.
No quiero generalizar pero siempre me parecio que la obsesión del coleccionista compulsivo, el especialista frenético (entre otras) es una deformidad química producto de no poder filtrar bien en ese sentido. Igual (algunas veces, según) produce resultados interesantes.