En la entrevista hecha por Emmanuel Franco a Feda Baeza, este es presentado como ‘directora’ del Palais de Glace y ‘encargada’ de la gestión del 109 Salón Nacional de Artes Visuales. En dicha entrevista, quedan expuestas una serie de problemas fundamentales que nos permiten diseccionar no solo la politica cultural del Estado Nacional en la actualidad sino tambien las estrategias por las cuales ese Estado crea pantallas de humo para desviar la atención de problemas estructurales. Una pregunta que cabe hacerse, entonces, es si mi cancelación no fue parte de ese programa de desviación de la atención a los fines de vaciar de contenido la noción de identidad y derecho cultural a los fines del avasallamiento extractivista. Pero vayamos por partes… En este post, quiero poner la lupa en uno de los ejes centrales de la mencionada gestión de Baeza como director del Salón Nacional que es la proclama de identidad femenina como derecho privilegiado.
Cuando tuvo lugar la campaña de cancelación contra mí liderada por un grupo de feministas populistas filo-kirchneristas empleadas en el Estado entre las que se encontraban una tal Giordano, Andrea Giunta y el mismo Baeza; una de las acusaciones que se hicieron contra mí fue la de ‘homófobo’ y ‘trans-fobo’. Mediante dichos epitetos se sacaban de contexto mis críticas (en tono de humor) al modo en el que Baeza había usado la oportunidad de su designación como Director del Salón Nacional del Palais de Glace para ‘salir del closet’ como ‘trans’ y había transformado dicho evento en un blindaje no sólo de su gestión sino de dicha proclama, desde el Estado.
Esto queda en evidencia al autodenominarse ‘directora’ o ‘encargada’ del Salón Nacional lo que presupone un reclamo de genero y no de genitalidad. Hasta aquí, estamos de acuerdo. Sin embargo, al tomar la decisión de concretar la definición de su identidad en el preciso momento de su vinculación con el aparato estatal en tanto parte del plantel directivo, cabe preguntarse sobre su relación específica con el daño y la subalternidad de aquella identidad, hasta él, invisibilizada.
Podemos decir que hay dos modos extremos y errados de hacerse de una identidad de genero. El primero (y como dije, errado) es el biologicista. Este modelo encuentra en Andrea Giunta su exponente más acabado. Según él, para ser mujer hay que poseer genitales femeninos y haber menstruado. En el otro extremo, lo tenemos a Baeza, quien cree que el género es una construcción, es decir, el producto de una decisión. Para él, ser mujer o ‘ella’ es el resultado de una preferencia que puede ir desde lo superficial (‘hoy, me siento mujer pero a la mañana me sentía oveja’) a lo vinculado con el daño y el trauma que están, necesariamente, asociados a una minoría, históricamente, dominada. Según entiendo, esta segunda opción de reclamo identitario es válida. Ser mujer implica pertenecer a una minoría dañada y dominada por una mayoría patriarcal. Esto significa que no se puede ser o reclamar ser mujer sin haber experimentado el daño de la violencia patriarcal y masculina. Por daño me refiero a la sensación al caminar por la calle, de que alguien la siga y que esa persona que la amenaza, tenga la fuerza suficiente como para dominarla y, posiblemente, violarla. Esa sensación, que toda mujer alguna vez sintió volviendo de una fiesta a la noche, es muy material. Esto es algo que cruza la experiencia de estigmatización de los gays pero este entrecruzamiento no es automático. Baeza, es un joven blanco de clase media o alta. Tuvo todas las oportunidades que su proveniencia social, racial y de género le brindaron. Laboralmente nunca experimentó el estigma de su condición gay porque, precisamente, la mantuvo oculta. Si hubo trauma, ese trauma fue producto de su propio privilegio. Dicho de otro modo, sus estandares de tolerancia al dolor psiquico pudieron ser bajos por el privilegio del entorno en el que creció y con el que contó. Es por esto que cuando asume un cargo público y lo usa de plataforma para transformarse en un ejemplo de proyección de la propia subjetividad en una politica publica estatal basada en la adquisición de esa identidad minoritaria -que ademas estaba alineada a los objetivos más generales del gobierno- vale preguntarse si no está cometiendo un acto de ‘apropiación’ del daño (de mujeres, en general) y estigmatización (de gays y trans pobres) ajenos. Es lo suyo identidad o una espectacularizacion de una politica de identidad en un gobierno falto de ideas?. Esto debería ser tema de debate.
La ironía del caso es que el Suplemento Soy de Pagina 12 en la persona de su directora cuyo nombre no recuerdo, me acusó a mí de apropiarme de ‘batallas ajenas’ cuando es, precisamente, en el seno de este gobierno donde dicha apropiación acabó siendo instrumentalizada a los fines del control social y la propaganda política. Digo esto porque el caso de Feda Baeza es un caso clave para entender el modo en el que el gobierno de Alberto Fernandez vació y acható la reinvindicación de las politicas de identidad mientras avasalló sistematicamente los derechos de esas minorías a la que suponía defender con politicas inflacionarias y paralizantes. J A T
EL LANPODCAST CON JORGE PORCEL JR
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Cañete, el gobierno “es” de Alverso Fernández no de la morsa.
¿Qué pasa si un empleado público tiene problemas con las drogas?
¿Hay alguna ley en relación a eso?
Porque la adicción que tiene/sufre Federico Baeza ya bastaría para sacarlo de su puesto.
Mientras tanto en el feudo de Gildo Insfran…
https://twitter.com/infobae/status/1451539288726908934
No estoy de acuerdo que su reclamo de género sea válido para resguardar su posición como encargada, es sencillamente usar su pertenencia su minoría como coraza para que nadie la critique, decis algo y te cancelan por transfobico.
Lo que debería ser un escándalo es lo que dice en la nota, otorgar premios a artistas sin juzgar la obra sino más bien el contexto e identidades del artista.
Se imaginan? Pepito pinta como el culo, pero eso si le damos el premio por buen pibe.
En el mejor de los casos es naive, se debe creer Evita.
En el peor de los casos, del cual estoy seguro que es justamente el caso, está mujer está blanqueando la mafia del amor, dar espacios (y recursos) a sus amistades sin juzgar algo objetivo. Es muy similar al manejo de su ‘maestro’ Jacoby, lo vimos en Venus como la ‘oposición’ casi nunca ocupaba espacios en muestras.
Obviamente que el poder corrompe, pero también destruye, la reputación de los salones va a terminar en la cloaca, una pena.
messirve que LANP no se haya a la última telenovela nacional wandachinada que aparece hasta en la sopa, y que conocemos hasta los que nos importa un pito, es un espacio de respiro.
Arte Arte Arte
https://www.infobae.com/vidriera/2021/10/22/15-fotos-ginette-reynal-presento-su-nueva-muestra-de-arte-kintsuji/
Entiendo seas autoreferencial, es tu blog. Pero no podes seguir sosteniendo que la movida en contra tuya por la que te sacaron un premio fue por una cuestión identitaria (porque sos gay o marron, etc)’ No sos marginal para nada. Y te pones en victima, lo mismo que criticas en cierto feminismo.
Seguramente publicaciones tuyas molestaron a algunos poderosos, pero lo que mas molestó fueron tus comentarios para nada humoristicos, sino con bastante mala leche contra gente que nada que ver ( lectores que osaron criticarte, escritores adictos, laburantes como Silvana con un mal dia que tuvo la mala suerte de atenderte en una bar y a la que filmaste e insultaste, etc) .
Ademas de hacer comentarios misoginos, gordofobicos y transfobicos ( vos o tus comentaristas, lo que es lo mismo, ya que tenias la opcion de borrarlos como si borras cuando te critican), comentarios que no eran “chistes” sino expresion de tus prejuicios y odios.
Espero algun dia lo reconozcas.
Hoy, la lectora Profe reaccionó ante mi critica situada del construccionismo identitario de Feda Baeza de la siguiente manera: ‘Entiendo seas autoreferencial, es tu blog. Pero no podes seguir sosteniendo que la movida en contra tuya por la que te sacaron un premio fue por una cuestión identitaria (porque sos gay o marron, etc)’ No sos marginal para nada. Y te pones en victima, lo mismo que criticas en cierto feminismo. Seguramente publicaciones tuyas molestaron a algunos poderosos, pero lo que mas molestó fueron tus comentarios para nada humoristicos, sino con bastante mala leche contra gente que nada que ver (lectores que osaron criticarte, escritores adictos, laburantes como Silvana con un mal dia que tuvo la mala suerte de atenderte en una bar y a la que filmaste e insultaste, etc). Ademas de hacer comentarios misoginos, gordofobicos y transfobicos (vos o tus comentaristas, lo que es lo mismo, ya que tenias la opcion de borrarlos como si borras cuando te critican), comentarios que no eran “chistes” sino expresion de tus prejuicios y odios. Espero algun dia lo reconozcas’.
Creo que hay que situar tanto mi comentario como la reacción de Profe para poder avanzar en el análisis ya que lo que para mí es ‘humorístico’ para ella es ‘mala leche’ y lo que para mí es ‘intervención cultural’ para ella es ‘discurso del odio’ y desde ese filtro parte todo su análisis de lo enunciado en el blog. Así Silvana de Starbucks no abusaba de su ‘poder’ para maltratar a mi amiga autista que no entendía la diferencia entre los diferentes café sino filmarla es insultarla; el caracter abierto de los comentarios del blog con poca (aunque alguna) censura son para ella habilitación de comentarios misoginos, gordofobicos y transfobicos de los que yo paso a ser automáticamente responsable y el escritor adicto maltratador de mujeres que utilizó narrativas personales dichas en el anonimato de Narcoticos Anonimos para escribir un libro es tambiena automáticamente una víctima. Evidentemente, en el mundo de María Coll, ese es el nombre de guerra de Profe, el universo se estructura como el mundo mal intencionado de LANP y un universo de víctimas inoscentes que no pueden reponerse a un epíteto o insulto aún participando como protagonistas públicos. Pero para esto tenemos que hablar del insulto y recordar que yo mismo he sido catalogado de sidoso y mi muerte ha sido deseada en este blog sin yo censurarlo.
Pero no se puede hacer crítica sin situarse. En mi crítica a Feda Baeza, necesité diferenciar mi originario lugar de subalterno en tanto hijo de pobre guaraní del del blanco privilegiado que se apropia de esa identidad para usarla como arma política mediante la que se blinda con más privilegio aún en su ya privilegiada posición. Esto no es menor porque desde la subalternidad, uno debe recurrir a estrategias más agresivas y menos ‘appropriate’ y ‘polite’ para ser escuchado. Esto bien lo sabe el movimiento feminista en el que las souffragettes en la primera ola, insultaban y ensuciaban a hombres en público para llamar la atención. En sentido estricto, el metodo de LANP es estrictamente feminista.
Pero insisto con situarnos. Puedo decir quién es Profe porque ella misma asistió como becada a un curso mío para una vez en el curso decirme que el nombre con el cual se había presentado no era el suyo porque ‘ni loca se presentaría con su verdadero nombre’. Esto me fue dicho con ochenta participantes a mi curso a metros de ella. Lo oscuro de su modo Mata Hari-esco me pareció un abuso de mi hospitalidad y mi confianza pero de entrada me manifestó su rechazo al modo en el que yo había hablado de un amigo escritor. Como dije antes, su nombre (de guerra) es María Coll y para situarla, ella pertenece al mundo del arte y la literatura de clase media y media alta y es blanca y se confiesa amiga, al menos, de un escritor famoso a quien defiende con uñas y dientes. Esto debe decirse de entrada para situar su privilegio y su punto de vista que podría ser catalogado de fanático y resentido pero eso sería acusarla de lo que ella me acusa a mí.
Lo importante para los fines de este post que el argumento de María Coll es maniqueo entanto construye una serie de oposiciones absolutas y al hacerlo, vacía de cualquier posibilidad de disenso politico real al blog, olvidandose de que su objetivo ha sido, desde su creación, poner en evidencia los mecanismos exclusionarios del privilegio blanco de los grupos de amigos que monopolizan no solo los modos de consagracion sino tambien la distribución de recursos materiales y públicos, mayormente, estatales y cuando no, provenientes de un tipo de mecenazgo decimonónico y absolutamente patriarcal. Dicho de otro modo, cuando alguien (que ni siquiera fui yo) llamó (antes del Me Too, es decir, en otro contexto cultural) ‘gorda’ a un artista que basó su carrera en construir una relacion afectiva con mecenas como Ama Amoedo o Alec Oxenford cuyos modelos de patronazgo corresponden a los criterios über-patriarcales del siglo XIX en donde principios como la familia y la herencia son presentados bajo el eufemismo de la diferencia; no deberíamos hablar, realmente, de discurso del odio sino de visibilización agresiva de practicas exclusionarias endogámicas mediante las cuales se perpetùa un sistema que excluye. Cuando desde el blog se señala que la directora de una de las Fundaciones de arte más importantes de la argentina lo es por ser amante del mecenas, se visibiliza un mecanismo exclusionario como nadie más lo ha hecho ni lo puede hacer en la cultura auto-represiva y disciplinante de la Post-Dictadura argentina.
Estructurar el mundo de la construcción de sentido en la oposición entre ‘discurso del odio’ y ‘discurso benéfico’ es una simplificacion que descansa sobre la fantasía de que los miembros de ‘la mafia del amor’ son víctimas traumadas que no pueden reponerse a un epiteto o insulto en un debate público. Es como si los miembros de la mafia del amor, todos blancos y privilegiados, se hubieran blindado mediante la apelación a la crítica agresiva transformandola en ‘discurso del odio’. Si yo hubiera sido un blanco, miembro de la mafia del amor, mi intervención hubiera, posiblemente, sido considerada como mero exabruto como los de Gumier Maier o De Loof en Twitter o Facebook. Recordemos que Gumier me amenazó, envió toda una serie de epitetos racistas y nadie hizo mención a ‘discurso del odio’ sino que se lo avaló. Sergio de Loof hizo dos obras en donde escribe ‘Cañete Negro’. Por qué lo de De Loof es arte y Gumier es crítica y lo mío ‘discurso del odio’ suficiente como para retirar un premio ganado en buena ley? Bueno, en principio porque mi postura es contraria a esos grupos y tambien, posiblemente, porque mi orígen social es diferente y cómo Coll dice, a partir del esfuerzo y la inteligencia di vuelta esos origenes y evité perpetuar mi postura ‘marginal’. Lejos de victimizarme eso es empoderarme. En esto Coll se equivoca y mucho. Además estoy convencido de que el modo en el que fui tratado por Mari Carmen Ramirez y el Museo de Houston fue racista. No hubieran tratado a un ciudadano norteamericano o a un miembro blanco latinoamericano del board de esa forma, jamás. Una institución seria jamás se hubiera plegado a semejante movida pero demostró ser corrupta y llevó ese momento como un herida de honor que me constituye como intelectual.
Lo que se puede contra-argumentar, sin embargo, a lo por mí aquí planteado es que no era necesario ser tan agresivo o habilitar insultos de foristas y comentarisrtas. Frente a esto insisto en que lo periferica de mi posicion exigía y exige la capacidad publicitaria de tomar la palabra y ser escuchado. Cómo iba a ser escuchado si usaba los modos del discurso dominante y no adscribia a los terminos de privilegio dominante a los que adscribe militantemente María Coll por pertenencia de clase y de raza?. Es como si al subalterno se le sacaran todos los accesos a la apropiación de una voz para habilitarlo solo en casos totalmente controlados y excepcionales en donde esa subalternidad deviene un producto inerte del mercado. El resto es demonizado como odio precisamente porque no proviene ni confirma ese privilegio. No te equivoques, María Coll, yo ni me victimizo ni me considero marginal porque di, espectacularmente, vuelta mis condiciones de origen y eso es lo que molesta. J A T