El Primer Pacto de Olivos

Las redes sociales, como la Universidad Pública son el territorio de la elite de clase media que ha tomado por asalto el aparato del Estado y se lo ha repartido tras que simulara una victoria sobre las fuerzas conservadoras en 1982 tras que una muy conveniente guerra suicida transformara el irresuelto conflicto racial y de clases en la Argentina en una narrativa historietista de héroes y villanos. Siendo ese héroe, por ejemplo, Raul Alfonsin quien no tuvo ningún empacho en entregar precisamente aquello por lo que se lo recuerda “con cariño”; ficción que de no existir lo reduce al mediocre gordo boludo que siempre fue jugando a los No Alineados sin guita en el banco y sin ponerse, como la India, rapidamente a armar una bomba nuclear.

Con Alfonsin aterrizó una Armada Brancaleone juvenil que se especializó en la cooptación del Estado que, desde ese momento, fue transformado en una máquina generadora de alegría siguiendo la tradición paterno-clientelista iniciada por el General Juan Domingo Perón. Los 90s fueron los años en los que el pacto radical peronista se afianzo. Ese es el verdadero Pacto de Olivos. Un pacto espectral que unió dos tradiciones de parasitismo profesional y que llevan desde dentro de la UBA y el Conicet a, Martin D’Alessandro, un ex colaborador mío en la organización del Museo de la Memoria allá por 1999 a decir en un paper recien publicado en Academia.edu lo siguiente: “Al menos desde 1983, ha existido una importante convergencia ideológica, institucional y electoral entre la UCR y el Partido Justicialista. Esa convergencia se evidencia a partir de una serie de interconexiones entre dos universos que, de manera paradójica, últimamente aparecen como incompatibles e irreconciliables”. Arriesgando una retorica que calificaría de Neo barroca en D’Alessandro, resumiría el asunto diciendo que lo que compatibiliza a ambos socios es un acuerdo de cúpulas porteñas para el reparto de la recaudación impositiva entre esas élites. Un acuerdo monorracial.

El Acuerdo de San Nicolás o San Vicente?

El problema de este acuerdo porteño es que se apoya sobre arenas movedizas. Esas arenas no son firmes por dos razones. La victoria de unitarios sobre federales en el siglo XIX aseguró la predominancia del puerto de Buenos Aires en la era agrícola e industrial y esa victoria se mantiene partiendo al país en dos bloques: uno medieval (el interior) y uno ficcional (Buenos Aires). Las consecuencias de esto han sido invisibilizadas por una política cultural negacionista, racista y elitista.

El debate racial se da brevemente en tiempos del primer peronismo y se barre debajo de esa alfombra semántica que es el concepto de mestizo. Me atrevo a decir que luego re-emerge con mi cancelacion. En una, segun entiendo, histórica entrevista hecha por Rodrigo Duarte, en la yo digo en un diario nacional lo indecible: “En este pais, el hijo de un boxeador guaraní no puede tener opiniones claras ni poder”. La violencia y desprecio de la clase media alta y alta atrincherada en el Estado solo puede ser explicada desde ahi. Mi existencia como negro critico, una paradoja insoportable en el Sur extremo, pone en peligro los cimientos de naturalización de la propiedad de lo publico que ha venido reclamando tener. A Milei ahora se lo acusa de algo parecido. Obvio, no viene de la casta ni del cafe de Puán. Danger!

Andate a la Concha de tus Madres

La segunda razón para la inestabilidad del pacto social del que depende la tranquilidad social es el imposible déficit fiscal y gasto público fundado, como plantee en un post sobre el Gordito Boludo de Alfonsín, en el pensamiento mágico de creer que el lujo de financiar capas geológicas de ñoquis, una casta cultural a base de premios artísticos con pensiones vitalicias como si fuéramos Paris en 1890, lo paga el Espíritu Santo. Pero esa creencia no es pensamiento mágico sino liso y llano racismo porque mientras se subsidia a los integrantes de Identidad Marrón o se contrata travestis morochos haciéndoles creer que la contratación estatal equivale a una consagración personal y, también mágicamente, a una reinvindicación identitaria, eso se hace quitándole los fondos a escuelas y hospitales. En materia de activismo, el resultado es aun mas caro porque reduce el problema de las minorias a una cuestion de color, de aceptación o de moda. Aun peor, se los hace visibles y una vez que están todos afuera, en la mira, identificables y empleados por el Estado se los ataca o se los hambrea. ¿Quién les va a dar las armas para defenderse cuando eso ocurra? El Argentino, a pesar de oleadas de crisis terminales, sigue creyendo que la guita sale de un repollo y que lo que se pone en un lado no se quita del otro. En rigor de verdad, la realidad es aún mas perversa porque hay un entendimiento silencioso de todos los involucrados en torno de la máquinita que imprime billetes . El resultado es inflación, un costo que pagan todos pero sobre todo, lo pagan los pobres. Dicho de otro manera, todo el peso de la política conservadora y pseudo progresista cae sobre él realmente pobre y cuando se habla de la segunda, en realidad lo que se está hablando es de habilitar al tilingo de clase media a que no sea competitivo.

El Dedito Sucio de Caca de Massa… ah pará, no es un dedo

Pero Argentina es bizarra y la lógica pseudo progresista de la falta de competitividad no vino de los K exclusivamente sino que fue transformada en política de estado populista por Macri. Ese populismo se da de frente con el liberalismo prometido por Milei por lo que ahí tenemos un frente de conflicto importante y no hay duda de que el casi seguro presidente tendrá que ceder. Pero como tiene cierta independencia de criterio, no va a hacerlo sin dejar flotando algunas preguntas o al menos, protestas. Del otro lado, tenemos a Massa y la moralización, ese legado endemoniado que nos deja el progresismo antes de implosionar y abandonarnos en manos ya no de demonios sino del mismisimo Diablo. Un drogón de dedito levantado preguntando en la era de la postverdad si por sí o por no mientras una caterva de imbeciles lo celebraba como si hacer semejante pregunta no descalificara desde el vamos al interlocutor por mentiroso. El Kirchnerismo deja solo un dedito levantado aleccionando sobre identidades inamovibles porque su candidato sabe que si se derrite esa costra lo que queda es un pobre gordito viendo cómo hace para salir del clóset. Esto, en el país Lacaniano, por antonomasia, hace que el progresista se reciba de estúpido. Esa progresía blanca que cree, como decía el patron de Lobo Suelto ayer, que es el estandarte de una responsabilidad y de una memoria histórica. En los videos estaba al lado de Federici, Berardi, y la mar en coche. Es cierto, el Lobo está suelto.

Combatientes y Perejiles

Cuando se esgrime Malvinas como excusa para todo y se acusa a Milei de querer bajar el tema de la agenda porque realmente no da, a nadie se le ocurrió pensar que Malvinas fue un acuerdo de cúpulas entre los militares argentinos y norteamericanos para darle a Margaret Thatcher la legitimidad que necesitaba para importar de Pinochet el modelo neoliberal y llevarlo adelante? Y ya que hablamos de progresías, qué hacían Luis Alberto Spinetta y Marta Minujin en la grilla de la programación dictatorial en 1982? Te lo respondo fácilmente. Eran parte de un plan internacional para distraer a la sociedad en una gesta nacionalista que no fue otra cosa que una cortina de humo para que mires para otro lado mientras te la metían bien adentro? A alguien se le ocurre por un segundo que la pelotuda de Minujin, emocionada hasta las lagrimas por instalar esas almohadas conchudas en 42 y Broadway esta semana tiene una mínima porción de célula nacionalista en su cuerpo?

Ayer la comunidad judía argentina emitía un comunicado diciendo “los judíos dicen no a Milei”. Instar a la sociedad a votar reactivamente y con miedo es lo que asegura la perpetuación del cambio permanente de lo que nunca cambia. Ademas, los judíos se acercan, cada vez mas, a aquello que nos enseñaron a temer. Mientras se muere la generación que fue testigo del horror del Holocausto, en lugar de liderar con el ejemplo se transforman en el demonio mismo. Necesito dar pruebas del genocidio que estan perpetrando? No sera que la razon de ser judía depende de esa victimización que a su vez depende en la generación de su propia destrucción?

El Segundo Pacto de Olivos

Lo peor y lo mejor de esta campaña fue ver como se le caían las caretas a varios y me atrevo a decir que una victoria de Milei termina, casi seguramente, en un magnicidio o una internacion ejemplar con una, aun mas boluda, en el gobierno y Macri dando lecciones de moral y la progresía aplaudiendo. El acuerdo entre Macri y Cristina es perverso y le significó al primero sacarse de encima a Bullrich y a Larreta mientras que la segunda se saca de encima a Massa que es impresentable por donde se lo mire para solo tener que apretar el botón del Pami y ponerle la camisa de fuerza a Milei. Pero Hamlet, como dije hace unos dias puede terminar siendo Cleopatra y su sacrificio significar algo mas para la periferia.